Hermosillo: Por devoción Tomás construye una capilla por año a San Judas Tadeo

HERMOSILLO, Sonora.- La devoción de Tomás López Robles por San Judas Tadeo, ha servido para crear un ambiente de paz y armonía en algunas localidades de su comunidad, y su mayor deseo es seguir con su labor mientras la vida se lo permita, pues la satisfacción que siente es invaluable.

López Robles, de 58 años de edad, es un empresario hermosillense quien compartió su inspiradora historia en la que destaca la importancia de la fe, la comunidad y el compromiso personal.

Aseguró que su devoción a San Judas Tadeo no es un legado de toda la vida, sino un camino que comenzó hace diez años, cuando su amigo, José “El Chino” Wong, lo invitó a una velación un 27 de octubre y se sorprendió al descubrir que el santo une familias y cambia vidas.

Me gustó porque vi que es una reunión familiar, porque es un ambiente familiar, donde se reúnen y son felices, y realmente de ahí empecé a ser devoto a San Judas. De eso fue hace diez años y desde ahí mi devoción nació”, compartió.

Aunque San Judas Tadeo es el “patrono de las causas difíciles e imposibles”, Tomás aseguró que no tiene alguna anécdota trágica para compartir como algunas otras personas, pero aseguró que no necesita un milagro extraordinario para tener fe en el santo.

EL MAYOR MILAGRO

Aseveró que el mayor milagro que San Judas le ha cumplido es mantenerlo con vida, salud y trabajo, y hasta el momento no le ha fallado, por eso es que se comprometió con él a construir una capilla por año en colonias de mayor incidencia delictiva.

“Ahorita ya tenemos seis. Este año, inauguramos una nueva en la colonia Las Lomas, el año pasado en Altares, tenemos en la Revolución I, en Los Jardines, en la Rinconada Nuevo León, tenemos aquí en El Jito”, apuntó.

Para mí, es una satisfacción personal el poder tener capacidad y los recursos para poderlo hacer, porque es algo que mientras yo tenga salud y trabajo, lo voy a seguir haciendo”, agregó.

LABOR QUE UNE FAMILIAS

El propósito de estas capillas va más allá de la devoción religiosa, pues Tomás dio cuenta que la presencia de estas capillas en barrios con problemas de desintegración familiar y delincuencia ha tenido un impacto positivo en la comunidad.

He comprobado que donde hacemos una capilla cambia el panorama, cambia la forma de vivir de la gente, como que agarran más respeto teniendo una capilla en el barrio y eso me impulsa a seguir haciendo lo mismo en diferentes barrios.

“Normalmente trato de poner la capilla en casa de una persona para que se haga cargo de la capillita”, agregó, “esto es, para que no se vayan a robar a San Judas, pero en los últimos dos años, en Los Altares y Los Jardines, lo hicimos en un parque público yla gente respeta, no pasa nada”.

Tomás confesó que la capilla que está en la esquina de las calles Ignacio Comonfort y Francisco Javier Mina, de la colonia El Jito, le tiene un cariño especial, ya que fue la primera que puso hace diez años.

Platicó que al principio construyó una capilla en una vivienda aledaña a la que actualmente se encuentra, pero compró el terreno que está a un costado y decidió hacer un santuario.

El terreno cuenta con un mural de aproximadamente siete metros de alto por diez de ancho, en el cual están plasmados los cerros de la Campana y de la Cementera, y en medio está la imagen de San Judas, de 6 metros de alto, resaltando su efecto en tercera dimensión.

“Este San Judas es una escultura. Tenía primero la capillita que también está aquí, después compré este terreno y lo teníamos pintado en la pared, pero conocí a un escultor que venía de Ensenada al Hotel Santorian a hacer unas esculturas y me hizo la imagen”, detalló.

El empresario mencionó que la imagen conocida por los devotos como “El San Judas de El Jito”, fue hecha hace aproximadamente 6 años y, desde entonces, es visitada durante todo el año por cientos de feligreses.

VELACIÓN

Desde hace una década, cada 27 de octubre, en la víspera a la celebración de San Judas Tadeo, Tomás López Robles realiza una velación dedicada al santo y a la cual invita a la comunidad en general, y ha llegado a reunir hasta 300 personas.

Este 2023 no será diferente, ya que realizará la velación a San Judas Tadeo, donde además de rezar, ofrecerá a los asistentes menudo, música y diversión con la presentación del comediante local Noé Beltrán.

Aseguró que mientras tenga salud y trabajo, planea seguir expandiendo su legado de fe y comunidad, inspirando a otros a unirse en esta noble causa.

Su historia es un testimonio conmovedor de cómo la devoción religiosa puede tener un impacto duradero en la vida de las personas y en la comunidad en general.