Niño promete a Dios personificar a su hijo, Jesús de Nazareth

HERMOSILLO, Son.- Ángel Alejandro Grijalva Leyva, de 10 años de edad, personificó a Jesús de Nazareth, en su primer Viacrucis infantil, ya que fue una promesa hecha a Dios, incluso hasta dejarse crecer el cabello durante un año para su representación en la Pasión de Cristo.

Le prometí a Dios que si nos ayudaba a la familia, que lo iba a hacer (Viacrucis) aunque fuera duro o cansado”, expresó Ángel Alejandro, quien no quiso hablar sobre el problema que enfrentaban en ese momento, al igual que sus padres.

“Le prometí no cortarme el cabello, no quería ponerme peluca”, agregó el pequeño. En el Viacrucis, Selena Leyva, madre del niño, se acercó a su hijo para preguntar cómo se sentía.

Me duele el hombro y también las piernas, pero me siento muy contento”, respondió a su mamá, quien lo acompañó durante todo el recorrido.

La Iglesia de Santa Lucía realizó ayer un Viacrucis de niños que toman clases del catecismo para que se sientan parte de la Iglesia Católica, aumenten su fe y reflexionen sobre la Pasión de Cristo.

Tijuana

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Decenas de niños de cinco a 15 años de edad participaron en el Viacrucis que se celebró en las faldas del Cerro de la Campana en Hermosillo, ante decenas de adultos y jóvenes que estuvieron como espectadores.

Los pequeños de catecismo del Centro Santa Lucía se prepararon con un año de anticipación en los personajes que cada uno representó y algunos de ellos ya habían participado en años anteriores, lo que les facilitó el aprendizaje de los diálogos.

Esta tradición, que se ha ido perdiendo año con año, se trata de mantenerla viva en los pequeños con la finalidad de que se sientan parte de la Iglesia Católica, aumenten su fe y reflexionen sobre el “camino de la cruz”, coincidieron algunos hermosillenses en el lugar.

Este año, a diferencia de los anteriores, Ángel Alejandro, quien representó a Jesús de Nazareth, se dejó crecer su cabello natural para no usar peluca e incluso pidió permiso en la escuela con el propósito de hacerlo ver más real.

Pese a las altas temperaturas que se registraron ayer en la ciudad, los niños y adolescentes que participaronen el Viacrucis realizaron una personificación impecable en el tiempo que duró su participación.

Durante la caminata por el Cerro de la Campana hasta la crucifixión del menor que personificó a Cristo, las representantes del Centro Santa Lucía rociaron con agua a los pequeños para mitigar el calor de más de 40°C que se sintió en la capital.

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