Ganaderos nogalenses auguran que tendrán una buena primavera

NOGALES, Sonora.- A pesar de que el agua de las lluvias y nevada de la semana pasada no alcanzó a escurrir a la mayoría de los represos, porque se filtró rápidamente al subsuelo, lo cual es también bueno, se augura una buena temporada primaveral para el ganado, declaró Jesús García Hurtado.

Pinta bien la cosa, ya se miran muchas caras sonrientes y optimistas de los socios que van llegando a la ganadera. Ya se escucha que van a tener buena primavera”, dijo el presidente de la Asociación Ganadera Local (AGL) de Nogales.

Después de la prolongada sequía en la que muchos ganaderos colapsaron y otros más estuvieron a punto de tener que vender al menos la mitad de sus reses para que las demás sobrevivieran, ahorita existen mejores expectativas toda vez que hay excelente humedad y ya comienza a nacer el pasto, externó.

Esto trae como beneficio que el mismo brotará parejo a finales del mes que entra y entonces el ganado podrá “ramonear” a gusto, tanto el pasto y zacate, como los mezquites y otros ramojos que fortalecen el pastoreo y dieta de los animales, explicó.

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EMPIEZA A “VERDEAR”

Ahorita apenas está empezando a ‘verdear’ debajo de los palos y el ganado todavía no lo alcanza a comer, pero unos días más la cosa se va poner bonita, a partir de unos 20 días más, gracias a la humedad que existe”, calculó.

García Hurtado reiteró que sus compañeros ganaderos, los más conocedores de la Asociación Ganadera Local nogalense, la cual aglutina a 320 socios, comentan y opinan que para mediados de marzo ya habrá muy buena alimentación natural para sus respectivos hatos.

“Con esta esperanza y que nos caiga otra llovidita buena para que corra el agua a los represos nos sentiríamos más satisfechos, ya que los animalitos no tendrían que bajar a los bebederos de los ranchos o trasladarse lejos para saciar su sed”, contempló.

Observó que hubo sólo algunos pequeños represos, donde hay peñas y que corrió el agua, que sí lograron captación durante las pasadas lluvias, pero la mayoría no tiene garantizada aún la temporada porque están “escamados” por las sequías de los últimos años.