“Julio el bailador” brinda alegría en garita de Nogales

NOGALES.- Una bocina con rítmico sonido, grato al oído y para los automovilistas que se dirigen hacia el vecino País, por la garita Dennis DeConcini, acompaña a Julio César Ortiz Alvarado mientras se gana la vida como bailarín cumbiambero, en la plaza 13 de Marzo.

Aparte de ejercitarse, entretiene a los automovilistas o peatones y se echa unos cuantos pesos a la bolsa, honrada y divertidamente, dijo al confiar que su trabajo principal es el detallado, embellecimiento y restauración móvil de vehículos, por eso solamente acude a la plaza por las tardes o cuando le cancelan citas.

Sobre cómo le nació esta idea, reveló que todo empezó por la necesidad de ponerse unas placas dentales y como no tenía los ingresos suficientes, entonces -como le gusta mucho bailar-, se le ocurrió hacerlo en la referida plaza, ubicada a unos cuantos metros de la entrada a la garita DeConcini, con una bocina pequeña y música “buena”.

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El ágil bailarín, de 57 años de edad, comentó que, además, en su momento colocó una cartulina donde explicaba el motivo por el cual bailaba (“hola, soy Julio César, espero que te guste mi baile y me apoyes para gastos de mis placas dentales”) y eso le ganó simpatías.

Expuso que, para su sorpresa, en tan sólo dos semanas y media, tanto automovilistas que hacen fila para cruzar a Arizona, como residentes locales, le brindaron su apoyo económico, reuniendo 6 mil pesos con los que completó su ansiada placa dental.

Gracias a Dios al público le gustó mis pasos, mis movimientos, mi coreografía. Fue rápido todo y ya después que había pagado mis placas dentales, me llegaron como 4 ó 5 personas que me querían pagar las placas, gratis todo, pero ya las había completado”.

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