Lo creían muerto, vuelve tras 36 años con su familia

PUERTO PEÑASCO, Sonora.- Gracias al interés del colectivo Familias Recuperando Tesoros en Puerto Peñasco, surgió una conmovedora historia que tuvo final feliz en este puerto, cuando sus integrantes iniciaron -con la ayuda de redes sociales-, la búsqueda de los familiares de un hombre en situación de calle.

La historia se propagó hasta Nogales, Sonora y Guamúchil, Sinaloa, de donde es originario Hipólito Rendón Rentería, de 65 años de edad, el cual perdió contacto con todos sus familiares.

Marisol Sillas Reyes, fundadora del citado colectivo de búsqueda y recuperación de personas desaparecidas y/o en situación de calle, manifestó que los familiares de Hipólito lo daban por muerto y no lo buscaban porque creían que había desaparecido en el Río Bravo, desde 1987, según le confiaron.

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Sobre cómo inició esta historia, narró que normalmente el colectivo acude a las vías ferroviarias, ya que diariamente descienden del tren varias personas y entonces los entrevistan y tratan de ayudarlos de alguna manera.

Entre esas ayudas está el preguntarles si desean contactar a algún familiar, ya que muchos de ellos pueden hallarse perdidos, desorientados o en condición de calle, y que probablemente sean buscados por sus familiares, expuso.

Hay veces que esos ‘tesoros perdidos’ para sus familias se encuentran muy cansados de la vida que están llevando, por las circunstancias que sean y acceden a que les ayudemos, con su permiso, a contactar sus familiares o conocidos, y nos brindan datos. Otros no quieren por desconfianza u otra razón”, atribuyó.

Entonces, dijo Sillas Reyes, Hipólito aceptó, les dijo su nombre completo, que era de Guamúchil, Sinaloa; luego le tomaron una foto y de ahí empezaron con la búsqueda en colectivos hermanos de Sonora y Sinaloa.

EL MILAGRO SE GESTÓ

Luego el milagro se dio, afortunadamente, porque a los días tuvieron contacto con uno de sus familiares en Guamúchil y comenzaron a procurarlo otros, no lo podían creer, lo daban por muerto, parece que era una persona muy querida en su pueblo, indicó.

“Nos hablaban llorando y sollozando, más una hermana mayor que se encuentra enferma y que vive en Nogales. Que no lo dejáramos ir, que lo entretuviéramos que iban a venir sus hijos inmediatamente por él, ya que comprobaron que sí era Hipólito.

Fue algo muy conmovedor tan sólo de ver y escuchar la conversación que tuvieron por teléfono cuando los pusimos en contacto porque al principio Hipólito cómo que no recordaba bien, decía que eran 14 años que no sabía de sus familiares y ellos le recordaron que eran más de 36 y también comenzó a evocar nombres de algunos ante el sollozo de con quienes hablaba, a través de un celular”, ahondó.

Sillas Reyes prosiguió relatando que Hipólito le reveló que perdió todo contacto con su familia porque le fue muy mal en la vida, aunado que la comunicación no era la misma y fue olvidándose poco a poco, asumiendo ese estilo de vida.

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Como no usa ni teléfono, mucho menos le entiende a las redes sociales que en ese tiempo no existían, se le fue dificultando más el regresar y el entorno en el que se sumergió tampoco le ayudó, y es una bendición que se haya reencontrado con sus familiares quienes rápidamente quisieron que regresara, comentó.

REENCUENTRO EN SUSPENSO

El caso es que ya logrado el contacto, como Hipólito vive en situación de calle lo quisieron llevar a un albergue o centro de rehabilitación y no quiso, como que se asustó y les dijo que él solito iba a regresar después, que no se preocuparan. Horas más tarde llegaron familiares de Nogales (sobrinos), como a las 10 de la noche, pero él no regresó, continuó.

“Toda la noche, los integrantes del colectivo anduvimos buscándolo junto a sus familiares y pensamos que se había arrepentido o algo así, uno piensa muchas cosas. No lo hallamos, pero nos quedaba una leve esperanza de poder contactarlo nuevamente si quería subirse al tren que pasa por la mañana.

“Pues le hicimos guardia y cuando iba amaneciendo, como a las 6 de la mañana, miramos a alguien que se acercaba hacia ellos y el corazón nos empezó a latir fuertemente. Era él. Imagínate el reencuentro a pesar de que sus sobrinos no lo conocían ni él a ellos cuando le dijeron que iban a recogerlo para llevarlo con su hermana a Nogales”, detalló.

Después los sobrinos de Hipólito llamaron a su mamá en Nogales y otros familiares en Guamúchil diciéndoles que ya lo habían encontrado.

“A través del celular se escuchaban continuos sollozos mientras le preguntaban por nombres que empezó a recordar. Igual a todas las del colectivo nos conmovió el poder servir a un reencuentro, esperando localizar más tesoros con vida”, concluyó Sillas Reyes, al agregar que Hipólito ahorita ya se encuentra en casa de su hermana en Nogales.