Consume Hermosillo el doble de agua por habitante: HCV

Hermosillo consume más de 400 litros diarios por habitante, casi el doble comparado con ciudades de condiciones similares, donde el promedio es de 210 litros por habitante al día, lo que evidencia el modelo de gestión de agua fallido del Municipio, de acuerdo al informe presentado por integrantes de la mesa temática sobre agua de Hermosillo ¿Cómo vamos? (HCV).

Los investigadores Nicolás Pineda Pablos, Luis Alan Navarro, Juan Jaime Sánchez Meza y Agustín Robles Murúa realizaron la presentación del documento “Crisis, Retos y Oportunidades de la Gestión del Agua en Hermosillo: En busca de la eficiencia, la sustentabilidad y resiliencia por medio de la cooperación y la participación ciudadana”.

Agustín Robles Murúa, investigador del Itson, subrayó que la cantidad de agua que se consume en Hermosillo no se mide, ya que sólo el 58% de los usuarios cuenta con medidor, mientras que en otras ciudades similares que consumen menos agua, el 95% de los usuarios tiene medidor en sus casas, oficinas o negocios.

Además, ese 42% de los usuarios que no cuenta con un medidor, consumen el 80% del volumen de agua que se suministra a nivel municipal, lo que significa que prácticamente se tira el agua, ya que no hay un control de qué es lo que hacen esas personas con el vital líquido.

En su ponencia, el especialista en hidrología y manejo de los recursos hídricos, explicó que la capital de Sonora cuenta con un serio problema de abastecimiento porque de descuidaron los mantos acuíferos con la llegada del Acueducto Independencia.

Nicolás Pineda, investigador de El Colegio de Sonora, aclaró que la finalidad del documento es presentar propuestas que busquen la mejora a corto plazo y garantizar a futuro la prestación del servicio de agua potable a los hermosillenses, ya que el cambio climático podría generar más eventos extremos, como sequías o inundaciones.

Reconoció que la Ley de Agua del Estado de Sonora brinda a Agua de Hermosillo (Aguah) la oportunidad para que preste un servicio eficiente y de calidad, pero hay otras cuestiones que no han dejado que la dependencia funciones como es debido.

Una de ellas, dijo, es el uso político-partidista del organismo ha generado una alta rotación de personal directivo que afecta la continuidad de los programas operativos, ya que en los 20 años desde que se creó Aguah, han estado al frente diez personas distintas y cerca del 50% de ellos no acumulan más de dos años de experiencia.

AGUAH COMO ORGANISMO AUTÓNOMO, PODRÍA SER UNA SOLUCIÓN

El especialista de El Colegio de Sonora, Luis Alan Navarro, en su exposición comentó que la mejor solución para que el sistema de agua potable en Hermosillo funcione es que el organismo operador de agua sea independiente y autónomo, sin un manejo político y gerencial.

Destacó que uno de los componentes importantes de los organismos operadores de agua es la participación ciudadana y en el caso de Aguah, éste cuenta con un consejo consultivo integrado por 10 ciudadanos, quienes discuten y deliberan todos los asuntos relacionados con el organismo.

De igual forma, se cuenta con una Junta de Gobierno compuesta por quince integrantes, de los cuales ocho son ciudadanos, y tanto el consejo ciudadano como la Junta de Gobierno son muy importantes, ya que es donde se decide por medio de votaciones las decisiones definitivas.

Si se compara la estructura del organismo operador de Aguah con otros organismos de México, Hermosillo tiene una estructura muy superior para la participación ciudadana, pero el debate está en la representatividad de los miembros de estos grupos, ya que la selección de estos es dudosa.

Juan Jaime Sánchez Meza, especialista en los aspectos jurídicos de la gestión del agua, dijo que a 20 años de que el sistema operador de agua está en manos del Gobierno municipal se ha comprobado que éste ha fracasado rotundamente en enfrentar la responsabilidad para enfrentar el compromiso con los ciudadanos.

El diseño institucional del organismo municipal, además, ya ha agotado todas las modalidades y todas las posibilidades de organización e invariablemente ha incurrido en un fracaso”, dijo.

Se convirtió en un organismo descentralizado para desvincular la estructura y sus decisiones, agregó, iniciando con la decisión de quién habría de ocupar el cargo con mayor responsabilidad en el organismo.

Sánchez Meza aseveró en que la tarifa del agua se debe incrementar, ya que siendo un Estado desértico, cuesta mucho dinero sustraer agua potable.