La Plaza 5 de Mayo, testigo de la historia

Fue a partir del año 1916 cuando se comenzó la construcción de la Plaza 5 de Mayo en Navojoa, un lugar reconocido por los navojoenses, expresó Manuel Hernández Salomón, cronista de la ciudad.

Recordó que en realidad el plano original de la ciudad contemplaba cuatro sitios de este tipo: La Plaza 5 de Mayo, otra en donde se encuentra la Escuela Álvaro Obregón, una más en el terreno del Itson campus Centro y otra en la colonia Rosales.

“Quedó una, porque después se aprovechó el espacio, para hacer otro tipo de construcciones”, detalló.

El 5 de febrero de 1922, fecha en que se inauguró el alumbrado eléctrico, fue cuando comenzaron la construcción del kiosko de la plaza, el cual años después fue derribado.

“No ha habido presidente municipal que no modifique la plaza, por ejemplo al principio había bancas de madera y las cambiaron por unas de fierro, y a la gente ya no les gustaba sentarse, porque en tiempo de calor eran muy calientes” expresó.

Precisamente fue un presidente el que decidió remover el kiosko, el cual según menciona el cronista, daba un toque romántico al lugar.

Un dato importante es que cuando Navojoa estuvo sitiado, lo que hoy conocemos como la Plaza 5 de Mayo, era más bien una fosa, donde enterraban a los fallecidos en esos enfrentamientos.

En la actualidad, la plaza es uno de los lugares más concurridos por los habitantes de la ciudad, principalmente los domingos cuando se presentan artistas y grupos musicales, reconocidos a nivel local.