Migrantes abruman a agentes de EU en la garita de Lukeville-Sonoyta

LUKEVILLE, ARIZONA.- Gerston Miranda y su esposa estaban entre los miles de inmigrantes que llegaron recientemente a esta zona remota en la frontera Sur de Arizona con México, ingresaron a Estados Unidos a través de un hueco en el muro, y caminaron durante la noche unos 23 kilómetros con dos hijas en edad escolar para entregarse a la Patrulla Fronteriza.

No hay seguridad en mi país”, dijo el ecuatoriano de 28 años, quien perdió su trabajo cuando su empleador cerró debido a la extorsión de los delincuentes.

Un cambio en las rutas de contrabando de personas ha traído aquí una afluencia de inmigrantes de países tan diversos como Senegal, Bangladesh y China, lo que llevó a la Patrulla Fronteriza a buscar ayuda de otras agencias federales y generó escrutinio sobre un tema crítico para las elecciones presidenciales del próximo año.

Con cientos de inmigrantes que cruzan en el área diariamente, el Gobierno de EU cerró indefinidamente el lunes 4 de diciembre el cercano cruce internacional entre Lukeville, Arizona, y Sonoyta, Sonora, para así liberar a los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza asignados a ese puerto de entrada para ayudar con el transporte y otros apoyos.

Críticos de la medida, incluidos Katie Hobbs, gobernadora demócrata de Arizona, los dos senadores estadounidenses del Estado, el Gobernador de Sonora y los líderes de la cercana nación indígena Tohono O’odham, dijeron que eso podría dañar al comercio y al turismo.

El Gobierno federal debe actuar de inmediato para resolver la crisis absoluta causada por el cierre del puerto de entrada de Lukeville. Hoy (8 de diciembre) envié una carta al presidente Biden pidiéndole que reasignara miembros de la Guardia Nacional para ayudar en su reapertura…”.

Hobbs instó al presidente Joe Biden a reasignar a los 243 miembros de la Guardia Nacional que ya están en el sector de Tucson para ayudar a reabrir el cruce de Lukeville.

La mañana después de su cierre, alrededor de una docena de agentes de la Patrulla Fronteriza con uniformes verde oliva vigilaban a unos 400 inmigrantes que habían pasado la noche junto al imponente muro de bolardos de acero, envueltos en brillantes mantas de Mylar que luego dejaron entre cactus sahuaro y árboles de palo verde azul.

Las autoridades de EU se han encontrado tan escasas de personal en Arizona que han utilizado vuelos chárter para trasladar a inmigrantes de Tucson a tres ciudades fronterizas de Texas para su procesamiento, según Witness at the Border (Testigos en la Frontera), un grupo de defensa que analiza datos de vuelos.

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