Rusia podría retirarse de la Estación Espacial Internacional si EU no cancela sus sanciones en materia espacial
2021 se torna tenso en las relaciones espaciales entre Rusia y Estados Unidos. Dimitry Rogozin, director de Roscosmos, ha sugerido que Rusia podría abandonar su apoyo a la Estación Espacial Internacional.
2021 se torna especialmente tenso en las relaciones espaciales entre Rusia y Estados Unidos. Dimitry Rogozin, director de Roscosmos, ha sugerido que Rusia podría abandonar su apoyo a la Estación Espacial Internacional si Estados Unidos mantiene sus sanciones económicas, indica Gizmodo.
Desde que se anexionara Crimea en 2014, Estados Unidos mantiene una serie de sanciones económicas sobre Rusia, sanciones que se han endurecido en los últimos años tras las acusaciones al Kremlin de ciberataques y del envenenamiento del mandatario crítico con el gobierno Alexei Navalny. El caso es que esas sanciones suponen un obstáculo importante para la compra de procesadores necesarios en la fabricación de sattélites de telecomunicaciones. Rogozin describe el asunto con particular concisión:
Tenemos cohetes más que de sobra pero nada que lanzar con ellos. Tenemos naves espaciales prácticamente terminadas, pero les falta el microchip necesaio para funcionar que no podemos comprar debido a las sanciones.
La agencia ha dejado caer que Rusia podría retirar su apoyo a la Estación Espacial Internacional en 2025 si las sanciones se mantienen. El laboratorio en órbita comenzó a montarse en 1998 y sus primeros residentes a largo plazo llegaron en el año 2000. En todo ese tiempo, Roscosmos ha sido de vital importancia para el mantenimiento de la estación, y actualmente gestiona su propia sección en la ISS. La otra mitad está compartida por la NASA y los astronautas de otras agencias espaciales como la ESA. El compromiso de Roscosmos con la estación termina en 2024 y lo que la agencia está poniendo en duda es precisamente si lo renueva o no.
Las declaraciones de Rogozyn vienen a sumarse a una situación de bastante incertidumbre para el veterano laboratorio. La NASA está más enfocada en sus misiones a la Luna, y la administración de Trump quería poner la gestión de la estación en manos privadas con la llegada incluso de turistas espaciales.