SpaceX logra despegar el cohete Starship pero vuelve a explotar minutos más tarde

El sábado, SpaceX realizó desde Texas la segunda prueba del Starship, la nave más grande del mundo en alcanzar el espacio. Hubo un exitoso despegue y separación del propulsor y la cápsula, logrando superar el incidente del intento anterior en abril.

Sin embargo, lamentablemente, la prueba terminó con una explosión minutos más tarde. El despegue tuvo lugar en Boca Chica alrededor de las 7:03, con el Starship sobre su propulsor Super Heavy de 33 motores Raptor.

La separación de ambas etapas ocurrió menos de tres minutos después, gracias a un sistema de irrigación de agua implementado tras el fallo previo en abril.

Estaba previsto que el monumental cohete Starship, diseñado para alcanzar la Luna y Marte en el futuro, y con el que cuenta la NASA para su programa Artemis de regreso a la Luna, diera una vuelta casi completa a la Tierra, en el plazo de una hora y media, antes de caer en el Pacífico, cerca de Hawái.

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SpaceX había anticipado que el reto de hoy era la separación de ambas etapas y aclaró que un eventual nuevo fallo en el lanzamiento contribuía a reunir más información para hacer nuevos ajustes.

Nueva prueba tras explosión en el aire

La compañía de Elon Musk comenzó hoy con éxito esta crítica prueba después de unos siete meses de la explosión en el aire del primer test a unos cuatro minutos de su despegue, lo que obligó a la compañía a provocar su explosión.

Sin embargo, hoy, aunque avanzó en el proceso, terminó igualmente con una explosión sobre el Golfo de México cuando se encontraba a unos 145 kilómetros (90 millas) de la Tierra.

El Starship, con una altura de 121 metros, esperaba alcanzar velocidades cercanas a la orbital en esta vuelta, para estar mucho más cerca de aprovechar completamente su potencial.