¿Qué generó el “extraño ruido” que escuchó un astronauta en la nave Starliner?

La NASA informó este lunes que el “ruido pulsante” que reportó el astronauta Butch Wilmore, proveniente de la cápsula Starliner de Boeing, que actualmente tiene fallos, se debe a una retroalimentación en el sistema de altavoces.

“El ruido del altavoz se debe a una configuración de audio entre la Estación Espacial Internacional (EEI) y la nave Starliner. El sistema de audio de la estación es complejo, ya que interconecta múltiples naves espaciales y módulos, lo que a veces causa ruidos y retroalimentaciones”, dijo la NASA en un comunicado publicado en sus redes sociales.

En las últimas horas, Wilmore comentó que había percibido “un sonido inusual” y “pulsaciones provenientes de un altavoz” en la nave Starliner, que ha sufrido problemas técnicos y se espera que abandone la EEI el próximo viernes 6 de septiembre sin su tripulación original, formada por él y Sunita Williams.

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Extienden misión

Los dos astronautas se vieron forzados a extender su misión de diez días a casi ocho meses debido a estos inconvenientes técnicos, y permanecerán en la EEI hasta febrero, cuando está programado que regresen a la Tierra a bordo de una cápsula de SpaceX.

La NASA subrayó que es habitual que la tripulación informe al control de la misión sobre cualquier sonido inusual que provenga del sistema de comunicaciones, indica EFE.

“El ruido de retroalimentación en el altavoz mencionado por Wilmore no tiene efectos técnicos sobre la tripulación, la nave Starliner o las operaciones de la estación espacial, incluida la desconexión no tripulada de la Starliner de la estación, que está prevista para el viernes 6 de septiembre como muy pronto”, añadió la agencia espacial.

En resumen, la identificación del “ruido pulsante” por parte de la NASA como una simple retroalimentación del altavoz tranquiliza a la comunidad espacial sobre la seguridad de la Estación Espacial Internacional y la cápsula Starliner.

Otros ‘ruidos’ detectados en el espacio

En el espacio, en realidad no hay un medio adecuado como el aire para que el sonido viaje de la misma manera que lo hace en la Tierra. Sin embargo, los instrumentos en las naves espaciales han captado ciertas emisiones electromagnéticas y vibraciones que pueden ser convertidas a sonidos audibles.

Algunos de los “ruidos” más notables registrados en el espacio incluyen:

1. Ondas de Plasma: Las sondas espaciales han captado las oscilaciones del plasma en el espacio. Estas ondas pueden ser convertidas en sonidos que a veces se describen como “silbidos” o “ruidos chirriantes”.
2. Emisiones de Radio de Planetas: Planetas como Júpiter emiten intensas ondas de radio que, cuando se convierten en sonidos audibles, pueden parecer extraños silbidos o rugidos.
3. “Sonidos” de la Magnetosfera de la Tierra: Las ondas de plasma que interactúan con la magnetosfera terrestre han sido captadas por satélites y, cuando se convierten a frecuencias audibles, se asemejan a una especie de “canto de ballenas” o un sonido similar a los trinos.
4. Ruido de Fondo del Big Bang (Radiación Cósmica de Microondas): Esta es una forma de radiación que se puede medir y, aunque no es un sonido en el sentido tradicional, representa una especie de “eco” del Big Bang.
5. Ondas Gravitacionales: Detectadas por instrumentos como el LIGO, estas ondas son producidas por eventos cósmicos masivos como la fusión de agujeros negros o estrellas de neutrones. Aunque no son sonidos en sí mismos, los datos recolectados pueden ser transformados en una representación audible, produciendo sonidos como “chirridos” o “golpes”.

Estos “sonidos” son, en su mayoría, conversiones de diferentes tipos de señales detectadas por instrumentos científicos en las naves espaciales o telescopios. En realidad, son interpretaciones de datos en formas que nuestros sentidos pueden entender.