La mala gestión de los residuos plásticos llevará a que se dupliquen para el año 2050

Un estudio de modelización advierte que, si no se toman medidas adecuadas, los desechos plásticos mal gestionados podrían duplicarse a nivel global para 2050. Sin embargo, se estima que una serie de políticas bien implementadas podrían reducir en más del 90 % tanto los residuos plásticos como las emisiones asociadas. Según los expertos, se necesita un enfoque audaz para abordar este desafío.

Publicado en la revista Science antes de las negociaciones de la ONU sobre plásticos, el estudio, respaldado por inteligencia artificial, concluye que un tratado global con objetivos ambiciosos podría erradicar en su mayoría la contaminación por plásticos, que amenaza la salud humana, la biodiversidad y el clima.

A medida que el plástico se desintegra, se convierte en microplásticos y nanoplásticos que afectan ecosistemas en todo el mundo, desde el Ártico hasta las profundidades oceánicas. Además, su presencia plantea graves riesgos para la salud, incluidas enfermedades como el cáncer, trastornos cardiovasculares y problemas reproductivos.

El impacto ambiental del plástico también contribuye al cambio climático debido a las emisiones generadas durante su extracción, fabricación y manejo de residuos.

Investigación

Este trabajo de investigación, realizado por las universidades de California en Berkeley y Santa Bárbara, llega justo antes de las negociaciones en Busan (Corea del Sur), donde representantes de más de 190 países discutirán los detalles de un tratado “jurídicamente vinculante” para combatir la contaminación por plásticos.

Utilizando un modelo de aprendizaje automático, los científicos predijeron las tendencias de producción, comercio y gestión de residuos plásticos hasta 2050 y analizaron los efectos de ocho políticas posibles para mitigar el problema.

Si no se actúa, los residuos plásticos mal gestionados podrían alcanzar los 121 millones de toneladas métricas anuales para 2050, casi el doble de la cantidad actual. Si las tendencias continúan, entre 2011 y 2050 se generaría suficiente plástico para cubrir Manhattan con una pila de desechos que superaría diez veces la altura del Empire State.

Clima

El impacto en el clima también sería significativo, con un aumento proyectado del 37 % en las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas al plástico, alcanzando 3,35 gigatoneladas de CO₂ equivalente en 2050, lo que equivale al consumo energético anual de más de 436 millones de hogares o a las emisiones de cerca de 9,000 plantas de gas natural.

Las naciones del sur global seguirían siendo las más afectadas por esta crisis, a pesar de ser las menos responsables de ella, indica EFE.

Sin embargo, los investigadores consideran que es posible mejorar esta situación implementando un enfoque integral. Cuatro políticas clave podrían reducir tanto los residuos plásticos mal gestionados como las emisiones de gases de efecto invernadero vinculadas a ellos:

1. Exigir que los productos nuevos contengan al menos un 40 % de plástico reciclado.
2. Limitar la producción de plásticos a los niveles de 2020.
3. Invertir en la infraestructura de gestión de residuos, como vertederos y servicios de recogida.
4. Imponer una pequeña tasa a los envases de plástico.

La adopción de estas políticas no solo reduciría la contaminación, sino que también tendría beneficios climáticos, eliminando emisiones equivalentes a las de 300 millones de vehículos de gasolina durante un año.

“Este es el momento decisivo”, afirma Douglas McCauley. “Las negociaciones en Busan representan nuestra oportunidad única para abordar este problema global. Es posible erradicar casi toda la contaminación por plásticos, pero debemos actuar con urgencia”.

Sam Pottinger, otro de los autores del estudio, agrega que, aunque existen varias soluciones disponibles, se necesita un enfoque ambicioso para lograr resultados significativos.