Cada cuánto se debe lavar el cabello: La ciencia responde

Mantener una buena higiene personal no solo impacta nuestra salud física, sino también cómo nos percibimos y cómo nos perciben los demás. Sin embargo, la rutina de cuidado no es simplemente una cuestión de hábito; es un proceso que requiere atención para evitar daños innecesarios tanto a nuestro cuerpo como a los productos que utilizamos.

¿Con qué frecuencia debemos lavar el cabello?

Aunque mantener el cabello limpio es esencial, no significa que debamos lavarlo indiscriminadamente. Según el Instituto Quirúrgico Capilar, lavar el cabello diariamente ofrece beneficios como la eliminación del exceso de grasa, una sensación de frescura y la reducción de acumulación de productos. Sin embargo, también tiene desventajas: el lavado frecuente puede resecar el cuero cabelludo, estimular una producción excesiva de grasa y eliminar los aceites naturales que protegen el cabello.

Por su parte, la Asociación Colombiana de Dermatología y Cirugía Dermatológica sugiere lavarlo dos o tres veces por semana para minimizar el riesgo de dermatitis. Además, enfatiza la importancia de elegir un champú adecuado al tipo de cuero cabelludo, ya que lavar el cabello a diario podría provocar resequedad.

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3 consejos para mantener tu cabello hidratado

Al gunas marcas de shampoo plantean una estrategia flexible basada en el tipo de cabello:

• Cabello normal: lavarlo tres o cuatro veces por semana.
• Cabello graso: lavado diario para controlar el exceso de grasa.
• Cabello grueso, seco o rizado: una limpieza semanal suele ser suficiente.

Por lo tanto, la frecuencia ideal depende del tipo de cabello, los productos utilizados y, en caso de tener tratamientos o tintes, los cuidados específicos requeridos, indica Xataka.

Recomendaciones para un cabello saludable

Más allá de la periodicidad del lavado, existen prácticas adicionales para mantener la salud del cuero cabelludo y el cabello:

1. Masajea suavemente el cuero cabelludo al lavarte para estimular la circulación y evitar irritaciones.
2. Escoge un champú adecuado a tu tipo de cabello, asegurándote de que sus ingredientes sean beneficiosos para tus necesidades.
3. Realiza masajes capilares regularmente, empleando lociones que fomenten una mejor circulación sanguínea en el cuero cabelludo.
4. Minimiza el uso de accesorios que generen tensión mecánica, como gomas, clips o pinzas que puedan debilitar el cabello.
5. Evita secadores de cabello siempre que sea posible; permite que tu cabello se seque naturalmente al aire libre.
6. Lleva una dieta equilibrada.

Cuidar tu cabello no es solo cuestión de higiene, sino de encontrar un equilibrio entre lo que necesita y las técnicas que mejor lo protegen. Dale a tu rutina de cuidado el protagonismo que merece para lucir un cabello saludable y fuerte.