Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas / Columna Tijuana

Células alegres

Todo depende en cómo miremos las cosas, no en cómo son en sí mismas”.Carl Jung.

Cuando tienes esperanza tus células están alegres, por lo tanto más sanas, y cuando tienes dolor físico o dolor emocional no lo están. Y aquí hay que estar conscientes de que el dolor físico es lógico que duela por el trauma que ocurre en la parte del organismo donde se presenta, pero cuando el dolor es emocional el cuerpo lo resiente de la misma manera que el físico. Por eso cuando una persona se siente sola o rechazada también siente dolor y lo que esto conlleva.

QUÉ HACER

Es por ello que uno no sabe con certeza lo que otra persona en un momento dado está sufriendo. Y aquí entra una primera observación: somos muy buenos para juzgar pero no tanto para escuchar. Llama mucho la atención la famosa frase que dice “las palabras se las lleva el viento”, que para el caso no tiene nada de cierto. Cuando lastimas verbalmente a alguien, ojo padres de familia con hijos pequeños, no tienes idea del impacto que puede tener en dicho individuo.

¿Que se puede hacer para coadyuvar a que una persona se sienta bien?

Una primera cosa puede ser que seamos más hospitalarios, que la persona se sienta acogida. Mario Alonso Puig, famoso cirujano español, recuerda cuando va a un hospital nuevo donde no conoce a nadie, un Dr. residente sin conocerlo lo invita a cenar a su casa ese primer día para que conozca a su familia. Nunca lo ha olvidado, confiesa Mario Alonso.

Otro aspecto puede ser el de estar presente en la conversación con alguien. Muchas veces en un “dialogo” uno de los dos está nomás con la cara presente ya que su mente está en otro lado.

Tener compasión, que no se refiere a expresar “pobrecito” sino de comprender el sufrimiento del otro y tratar de hacer algo por reducirlo. Aquí en este caso recuerdo la anécdota que comenta Antonio Bienvenida, famoso torero español ya finado. En la década de los 50´s del siglo pasado su hermano mayor Rafael (si no mal recuerdo su nombre) tiene cáncer de huesos, y va a visitarlo al hospital en Madrid. La ciencia está muy atrasada entonces y el paciente sufre mucho dolor. Antonio no sabe qué hacer para entretener a su hermano qué pasa una mala tarde. De repente se abre la puerta del cuarto y voltea ver quien es, era su madre que viene de visita. Le pregunta a su hijo Rafael cómo está, y este le contesta con la mejor de sus sonrisas que está teniendo un día estupendo. Antonio capta lo que hace su hermano y no refiere nada de lo que ha estado ocurriendo.

Aquí encaja a la perfección una frase de Jean Paul Sastre: libertad es lo que uno hace con lo que le han hecho.

CONCLUSIÓN

Está comprobando, aunque se oiga un poco cursi, de que el amor cura. Y las emociones tóxicas, la desesperanza son la causa directa de más del 60% de las consultas con los doctores de medicina general acorde con estudio de la universidad de Harvard.

Término estimado lector sugiriendo que en esta época de Navidad procuremos que nuestras células anden alegres, y una manera de lograrlo es coadyuvando a que las de los demás anden también ídem. ¡Feliz domingo!

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

Temas relacionados