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Las autoridades sanitarias anunciaron el martes próximo pasado, la clausura y la incautación de miles de productos de Paradise, la empresa de cannabis que tiene como accionistas a personas de relevancia nacional, como el expresidente Vicente Fox. Les incautaron 1,881 sustancias con CBD, semillas de cáñamo, extractos de cannabis y otras sustancias de las que no tienen evidencia sobre su seguridad, calidad o el lugar donde fueron fabricadas. El establecimiento no contaba con aviso de funcionamiento. (Daniel Alonso Viña. El País. 25/7/23). Fox, quien durante su administración no promovió ninguna regulación formal para aprobar la marihuana, se integró durante el gobierno de Peña Nieto a este grupo de personas, dentro del negocio de la venta de la marihuana. Si somos un poco estrictos, el integrarse en un comercio de este tipo no es tan sencillo. Porque, yéndonos de adelante hacia atrás, la venta de este estupefaciente implica otras actividades que lo mantienen en la competencia comercial. Primero, debe de ofrecer un producto que está aprobado y su venta es legal en el país; segundo, debe tener un proveedor que cumple con todas las regulaciones que le permiten abastecer a los comercios. Deben existir campos agrícolas con siembras registradas, campesinos encargados de levantar la cosecha integrados a agrupaciones campesinas nacionales, estatales y locales, que cumplen con leyes y reglamentos, además de pagar impuestos. La Cámara de Diputados aprobó el uso, distribución y comercialización de la marihuana, y fue devuelta a la cámara de Senadores, donde no ha sido aprobada aún en este 2023. Lo cual implicaría que aún no es legal completamente.

Aceptando que la venta de la marihuana tiene cierta cobertura instiHermosillo, tucional, los comerciantes de las tiendas Paradise, aprovecharon los huecos en la legislación para el comercio, y le agregan 1811 artículos que contienen CBD (extracto de la marihuana) para incrementar el uso de las drogas ilegales, que tanto daño le han hecho al país. El argumento de estos comerciantes es el de que, se están perdiendo millones de dólares en inversión extranjera en nuestro país. Sin embargo, la marihuana es la droga que abre el camino al consumo de cocaína y heroína, que son la puerta para llegar al Fentanilo

El indudable anhelo de Fox es, encontrar avenidas que le permitan agenciarse de recursos financieros tan altos como pueda. En los días previos a la aprobación de la reglamentación para quitarles la pensión a los expresidentes, anduvo de lloriqui, diciendo que ese dinero apenas le alcanzaba para sus frijolitos. La verdad es que a los expresidentes se les pagaban, anualmente, 228 millones de pesos para que fueran atendidos administrativamente, con servicios de atención personal para ellos y sus familias, además de protección personalizada, con guardias proveídos por las Fuerzas Armadas. Finalmente, les otorgaban una pensión anual de 38 millones de pesos. Ahora está queriendo sacar ese dinero perdido, de la venta de uno de los estupefacientes que nos tienen al borde del exterminio social. Si bien es cierto, la marihuana no es ahora muy rentable para su exportación, sigue siendo una mercancía de alta demanda y oferta en todo México. Pero para Fox parece no haber límites, obtendrá dinero de dónde sea. Sin embargo, solo en algunos sectores del país es bienvenido, en muchos no. La misma Xóchitl Gálvez le marcó una raya. Vale.

*El autor es licenciado en Economía con maestría en Asuntos Internacionales por la UABC.