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Candidat@s

Haciendo un repaso de las personas que se han registrado a participar en el siguiente proceso electoral, desde diputaciones locales, alcaldías, diputaciones federales, senado, y presidente de la república, en la mayoría de los casos, veo más un enfoque de popularidad.

Roberto Vega Solís

Haciendo un repaso de las personas que se han registrado a participar en el siguiente proceso electoral, desde diputaciones locales, alcaldías, diputaciones federales, senado, y presidente de la república, en la mayoría de los casos, veo más un enfoque de popularidad- con el objetivo de asegurar el triunfo, que de capacidad y experiencia. Hay sus excepciones, por supuesto. Pero veo a un sinnúmero de candidat@s que no tienen ni la trayectoria, ni la formación adecuada para la importante responsabilidad a la que se están comprometiendo. Veo perfiles de deportistas, cantantes, actores, etc, que si bien en su materia y disciplina han logrado destacar, para ocupar un puesto de elección popular se requiere experiencia, preparación y vocación. Desafortunadamente cada vez son menos las personas interesadas en participar en la vida política del país. En nuestro sistema las candidaturas ciudadanas son escasas y la mejor plataforma para tener posibilidades de ser elect@, es ser promovido por un partido político, aprovechando su experiencia, recursos, base y plataforma. Muchas personas creen que ser funcionario les va dar poder , riqueza e influencia. Y desafortunadamente en muchas o la mayoría de las veces, si lo logran. Ese podría ser el incentivo que los motive, en lugar de procurar el bien común. Ser funcionario público debería ser un oficio de carrera, de formación, de aspiración. Por ejemplo, hoy tenemos a muchos embajadores por el mundo que se saltaron su asistencia al Instituto Matías Romero de Diplomacia y con ninguna experiencia en la materia, arrebataron la posición a personas de carrera. Vemos funcionarios que un día están en Pesca, al día siguiente en Turismo, luego en Gobernación, y al otro día en Hacienda. Dudo que con esa tasa de rotación y su poca preparación, puedan lograr un trabajo destacado. Por eso vemos muchas de las decisiones que se toman, como desaciertos que generan retroceso y grandes costos al erario. Muchos funcionarios creen que el dinero es infinito y se gasta sin mucho escrúpulo. Tan solo en el presupuesto federal de egresos nacional de este 2024 hay casi dos billones de déficit (casi 5 puntos del PIB), de dinero para derroche que no tendrá más que un impacto momentáneo, dejando comprometidas las finanzas para el siguiente gobierno. El dinero de deuda debe ser para gasto de inversión. Que genere prosperidad y desarrollo. Pero no se puede pensar como empresario si no se es empresario. Por eso desde la COPARMEX estamos impulsando con muchísimo entusiasmo nuestro modelo de desarrollo inclusivo, para que nadie se quede fuera, y vemos a las empresas como motor del desarrollo del país. Hago votos por que más hombres y mujeres empresarios se animen a participar en procesos electorales. Necesitamos un gobierno de empresarios, de los que saben analizar proyectos, cuidar los recursos y realizar inversiones con retornos. Recordemos que nadie es mejor, que todos juntos.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Hago votos para que se respete y se cuide el derecho fundamental que todos tenemos a la libre expresión. Cada vez son menos las voces críticas e independientes. Necesitamos cuidarlas y respetarlas. Es responsabilidad de todos. Porque los contrapesos son fundamentales para la salud de un país.