Verdades y Mitos del escritorio virtual del IMSS

Para quienes no lo han usado, el escritorio virtual del IMSS es una herramienta que permite presentar trámites en forma digital. La realidad es que no es aún la opción más conocida ni la más utilizada al día de hoy.

Es personalizado, es decir, dependiendo de quién acceda con su firma, ya sea patrón, representante legal, derechohabiente, o contador público autorizado para dictaminar, aparecerán las opciones que permiten realizarse en él. Dichos servicios digitales van dirigidos en primer lugar a derechohabientes y patrones y en un segundo lugar a contadores públicos autorizados para dictaminar.

¿Qué trámites pueden hacerse a través del escritorio virtual del IMSS?

En cuanto a los derechohabientes, los trámites que pueden realizar son muchos, incluyendo la agenda de citas médicas, altas en las clínicas, asignación de número de seguridad social, reimpresión de cartilla, consulta de incapacidades, trámites de pensiones, registro o actualización de beneficiarios y registro de cuentas interbancarias para cobro de incapacidades. Esto representa un ahorro de tiempo considerable para los trabajadores y también para el IMSS.

Sin duda, la pandemia fue determinante en la necesidad de mejora del IMSS de digitalizar sus servicios para evitar contagios, en lo cual ya se tenía un importante avance anteriormente.

En el sector patronal, los trámites en los que mejores experiencias se tiene por parte de los usuarios son las altas patronales y los cambios de domicilio, pero se puede utilizar para mucho más, como dijimos, hay que acceder y explorarlo. Se recomienda mucho también la consulta de los riesgos de trabajo terminados para presentar la declaración anual de prima de riesgo y así evitar inconsistencias.

¿Cuáles son los mitos del escritorio virtual?

Como todo sistema, ocurren con frecuencia fallas e intermitencias en su funcionamiento, pero finalmente funciona, por lo que hay que tener paciencia.

Uno de los mitos es que es imposible acceder por la configuración que requieren los equipos de cómputo para ello, sin embargo, eso puede resolverse con soporte del propio Instituto, una vez que se logre la configuración, hay que asignar en las empresas un equipo de cómputo para desarrollar ese tipo de tareas.

Como se comentó, los patrones que se dictaminan ya están listos para acceder al escritorio virtual en otros trámites; igualmente los que presentaron el alta patronal por esa vía. La recomendación, por lo tanto, va dirigida a aquellos empleadores que no lo han utilizado, basta dar de alta al representante legal y vincularlo con la empresa que representa.

Además del ahorro en tiempo, el uso del escritorio virtual ofrece la gran ventaja de que se puede acceder desde cualquier lugar y a cualquier hora del día, siendo que los trámites presenciales son limitados a horarios, y dependiendo el tipo de trámite, a la subdelegación que corresponda al domicilio fiscal.

El verdadero reto tanto para patrones, derechohabientes y para la contaduría pública, es promover el uso de esos servicios digitales para conocerlos, probarlos, y poder lograr que funcionen mediante el diálogo y coordinación con el Instituto, de otra manera, si seguimos optando por los trámites presenciales, no se podrá avanzar lo suficiente en su difusión y proceso de mejora.

*- La autora es Contadora Pública Certificada especialista en Seguridad Social.