Condena arzobispo asesinato de sacerdote
Moreno Barrón también lamentó que las familias de Culiacán sean rehenes de los enfrentamientos del narcotráfico desde hace más de 30 días.
Tijuana, B.C.- La iglesia católica de Tijuana exigió se esclarezca el asesinato del sacerdote Marcelo Pérez, quien fue ultimado al término de la misa dominical en su parroquia ubicada en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
El párraco fue defensor de la comunidad, ambientalista y constamente denunciaba la violencia generada por el crimen organizado.
El arzobispo de la Arquidiócesis de Tijuana, Francisco Moreno Barrón, señaló que este crimen es una de las tantas expresiones de violencia en México, las cuales busca erradicar la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo con la misma estrategia de seguridad nacional.
Particularmente el asesinato de este sacerdote reclama indignación de parte de la comunidad, yo condeno este hecho y me parece que su vida de lucha, de esfuerzo por el bien de los demás será su corona. Particularmente en los lugares donde se sufre esta violencia tenemos que garantizar que no solo los sacerdotes, sino toda la gente, pueda hablar con libertad, pueda luchar por la justica, por la paz sin el riesgo grave de ser asesinado”.
Sostuvo.
Moreno Barrón también lamentó que las familias de Culiacán, Sinaloa, sean rehenes de los enfrentamientos entre las organizaciones antagonistas del narcotráfico desde hace más de 30 días.
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Señaló que la sociedad civil está dispuesta a colaborar por la paz, pero es necesario que las tres órdenes de gobierno la incluyan en sus planes de acción.
Que dé resultados, que no sean solamente palabras sino verdaderamente un compromiso donde se invierta lo que sea necesario, recursos, materiales, humanos, pero que den resultados. Ya el pueblo está cansando de oír nada más buenos deseos, sin ver los resultados en sus hogares, en la sociedad. Cuando se dan estas actitudes de violencia son alarmas como para ver dónde hay que cuidar que esto no se vuelva a repetir”.
Declaró.
Asimismo, pidió a los sacerdotes luchar desde su trinchera por la libertad de expresión y la paz, ya que son representantes de las familias.
“No tener miedo a denunciar el mal y a proclamar también el bien. Tenemos que tener voz profética para denunciar el mal, el mal de cual procedencia y de cualquier lugar. Esa es nuestra vocación”, reiteró el religioso.
De acuerdo a la Arquidiócesis de Tijuana, en los últimos años fueron asesinados tres sacerdotes: uno en Rosarito, uno en Tecate y uno en Tijuana, Ícmar Arturo Cota, de la iglesia San Luis Rey de Francia.
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