La ‘Jefita’, una de las tantas mujeres que deambula en Tijuana

Tijuana, BC.- María del Carmen Guevara es una de las decenas de mujeres con problemas de adicción que viven las calles Tijuana. A sus 66 años se resignó a vivir en esta situación y con su problema de alcoholismo.

Le apodan ‘Jefita’ y es común verla beber o vender chácharas a fuera del Santuario de la Virgen de Guadalupe, en donde da el buenos días a los católicos de este recinto u ofrece sus productos a los transeúntes de la Plaza Bicentario.

Su declive emocional y económico inició a sus 61 años e inició de la pandemia del Covid-19, pues toda su juventud la dedicó a ser mesera, cantinera y trabajadora sexual.

Sonora

Por su agresividad piden comerciantes retirar a indigentes

La Jefita platicó que en el año 2020 en el bar de la Zona Norte, que se caracteriza por sus centros nocturnos y comercio sexual, la despojaron brutalmente de su pequeña fortuna conformada por alajas y dinero.

Mi vida fue del mundo. Me dejaron muerta, pero Dios todavía no me necesita”, expresó.

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La señora Guevara es originaria de Mazatlán, Sinaloa, en donde se encuentra su familia nuclear y como otras mujeres sin hogar se enfrenta a los maltratos verbales y físicos de parte de los caminantes u hombres indigentes.

Sin embargo, los comerciantes y locatarios la respaldan porque la consideran una mujer trabajadora y simpática, además es querida por rescatar a perros en situación de calle, entre ellos a Chapo.

Hoy que su casa es una pared y un cartón, y estar alejada de sus hijos, dijo sentirse en paz consigo misma.

Me siento más limpia, más honrada, siento que valgo más que antes. Ahora me dedico a trabajar en lo que la gente me da y soy feliz con mi perrito y me dedico a cuidar a los perritos”, platicó.

La Jefita admitió que es alcohólica y que trata de ayudar o brinda su compañía a otras mujeres para reducir los riesgos de ser violentadas.