Restauranteros de Rosarito alistan amparos por modificaciones a la normatividad de control de tabaco

Rosarito BC.- Alistan restauranteros amparos ante las modificaciones a la normatividad de control del tabaco que entrarán en vigor el próximo lunes, ya que a decir del presidente estatal de la Canirac, Alan Bautista Plasencia, éstas se contradicen con el reglamento que ya había sido sensibilizado y autorizado por las cámaras de diputados y senadores.

Dijo que si bien están de acuerdo en la promoción de la salud, porque la cámara apoyó desde el 2008, cuando de promulgó la Ley General de Control del Tabaco, y su reglamentación al año siguiente, no están de acuerdo con las modificaciones actuales, ya que nunca se les consultó de manera gremial.

Explicó que algunos restauranteros que se sienten más afectados, interpondrán de manera individual, pero con el apoyo de la Canirac un amparo contra las nuevas disposiciones y si bien aún no se sabe cuántos lo harán en el Estado, en Rosarito hay cinco restauranteros que interpondrán un amparo.

Nueva reglamentación

Bautista Plasencia, refirió que es prácticamente imposible que un establecimiento pueda tener un área para fumadores, ya que la nueva reglamentación especifica que no está permitido fumar en áreas donde se sirvan alimentos y bebidas, independientemente que se encuentren al aire libre, ya que si existe una zona para fumar debe de estar diez metros a la redonda de la gente, entre otras disposiciones.

Mencionó que difícilmente podrían hacer adecuaciones para que haya un área de fumadores, sobre todo en los bares y discotecas o en los clubes de playa, como en el caso de Rosarito.

“Estamos contrariados, porque quienes vamos a recibir las quejas y el malestar de los comensales somos los restauranteros, además de que en dado momento podemos recibir alguna multa o incluso la clausura del local, si no atendemos las disposiciones”, dijo.

Ante ello explicó que ya han sostenido reuniones con la Coepris, para que en esta primera etapa se tenga flexibilidad sobre las medidas, mientras la gente se sensibiliza y se colocan los letreros de prohibiciones en las restaurantes.