Fernando Valenzuela

EFECTO MULTIPLICADOR

Quien este viernes 1 de noviembre cumpliría 64 años se nos adelantó en el camino el pasado martes 22 de octubre; hace justo una semana. El “rey del tirabuzón”, Fernando Valenzuela, se fue tres días antes del arranque del “Clásico de Octubre” de este 2024 que tiene como protagonistas a los mismos equipos de hace 43 años: Dodgers de Los Ángeles y Yanquis de Nueva York.

En esa Serie Mundial de 1981, el oriundo de Etchohuaquila brilló en todo lo alto al ganar el tercer juego al son de 5 a 4, después de retirar en fila india a los más peligrosos toleteros del equipo neoyorkino. En el noveno inning de ese enigmático encuentro, el “Toro” Valenzuela -que detentaba en 1981 un contrato de apenas 45 mil dólares- se enfrentó a Jerry Mumphrey (alineado como segundo bat), Dave Winfield (tercero) y Lou Piniella (cuarto bat). A este temible trío de bateadores los retiró “a ritmo de conga” para desatar el alarido de los más de 56 mil aficionados congregados en el Dodger Stadium, también conocido como “Chávez Ravine”.

Tras el triunfo, que se escenificó un viernes 23 de octubre y donde Valenzuela tiró la ruta completa con 149 lanzamientos, el equipo de Los Ángeles ganó los siguientes tres partidos para adjudicarse el título de las Mayores. Después de ese “mágico y maravilloso 1981″, se desató en México y en el Suroeste de Estados Unidos la “Fernandomanía”, que tan buenos resultados le generó a la taquilla de los Dodgers y al comercio de este y del otro lado de la frontera.

Tras su paso por la “Gran Carpa”, el sonorense ganó dos Series Mundiales y fue seleccionado en seis ocasiones para el Juego de Estrellas de las Grandes Ligas.

DE YUCATÁN A CALIFORNIA

Fernando Valenzuela fue novato sensación en la Liga Mexicana de Beisbol con los Leones de Yucatán y por ello los Dodgers compraron su contrato un 6 de mayo de 1979. Su debut ligamayorista fue un 15 de septiembre de 1980 como tercer relevista ante los Bravos de Atlanta; apenas tenía 19 años. En esa campaña jugó 10 partidos, ganando dos y logrando un salvamento con los californianos, sin saber que meses después su apellido y el número 34 en su espalda serían protagonistas de todo un hito.

La apertura de la campaña 1981 marcó el inicio de su epopeya, donde tuvo que ser el abridor a última hora por una lesión de Jerry Reuss. El manager Tom Lasorda le dio la confianza al de Etchohuaquila, quien le cumplió con creces aguantando los nueve innings y recetando una blanqueada de dos carreras a cero a los Astros de Houston, permitiendo sólo cinco hits, dando dos bases por bolas y ponchando a cinco rivales.

Ese año, Dodgers fue el líder en la División Oeste de la Liga Nacional luego de la primera vuelta y se clasificó a la postemporada con récord de 63 ganados y 47 perdidos. Ya en los playoffs, el “Toro” embistió a Houston y también a Montreal antes de encontrarse con los Yanquis en la Serie Mundial. Luego de regresar con dos derrotas de Nueva York, al mexicano le tocó lanzar el tercer juego; lo ganó lanzando todo el juego, con nueve imparables, dos vuelacercas, siete pasaportes y seis chocolates.

Ese triunfo terminó siendo clave, pues los Yanquis ya no se levantaron y los Dodgers terminaron llevándose el banderín de las Mayores por primera vez desde 1965. En ese año de ensueño que fue 1981, Fernando tuvo 25 salidas, 11 juegos completos, 180 ponches y un récord de 13-7 con 2.48 de efectividad que lo hizo acreedor al Premio Cy Young y a la distinción de ser el Novato del Año, sumado a su llamado al Juego de Estrellas en Cleveland, donde fue abridor y recetó dos ponches en la primera entrada.

La carrera de Valenzuela en la gran carpa duró 17 campañas con 173 victorias y 153 derrotas, 2,074 ponches en 2,930 entradas de labor en 453 partidos, de los cuales inició 424 para una efectividad de 3.54 de por vida. A 43 años de la gloriosa aparición del sonorense en las Grandes Ligas, ¿qué mejor homenaje para el sonorense que Dodgers repita esta semana la hazaña de 1981?

DOS PRESIDENTAS

Dentro de una semana, Estados Unidos tendrá su elección presidencial y por primera vez en la historia podría resultar triunfante una mujer. Por ahora, las encuestas y las apuestas más “los estados columpio” reportan muy cerrada la contienda entre Kamala Harris y Donald Trump. Sin embargo, no se descarta que en la recta final Harris sorprenda al magnate republicano.

De ser así, se avecinan nuevos tiempos con dos liderazgos femeninos en la Unión Americana y en México. Esperemos que sea para bien.