La doctora

Pero No tengo vocación de amarrar navajas, no me sale, no es lo mío y no le entiendo.

Pero la verdad es que tengo una mucho mejor opinión de Claudia Sheinbaum que la que tuve de Andrés Manuel López Obrador.

Como candidatos y luego como gobernantes ambos. Entiendo y veo que en la Presidenta se mantienen líneas discursivas similares a las de su antecesor, ella es al final mujer de izquierda, incluso más auténtica o con más trayectoria que el propio AMLO.

Al menos ella no anduvo brincando de un partido a otro, así como muchos que hoy forman parte de la llamada 4T.

En el tema que nos atañe a los mexicanos que es la inseguridad está a la vista de todos que ya se acabaron los abrazos.

Quedan los balazos (cuando sea necesario), las labores de inteligencia, la coordinación entre instituciones y entre países (concretamente con EEUU) y el alto deber de recuperar para la gente de bien vastas regiones de México.

Algunos analistas (habemos muchos ahora) consideran que lo mejor que le pudo pasar a la doctora es la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, porque si ya pensaba dar un viraje a la estrategia contra la delincuencia, el vecino genera aún mayores motivaciones.

Así que si ella quiere seguir diciendo “abrazos, no balazos”, yo no tengo ningún inconveniente, siempre y cuando en la práctica el gobierno haga replegarse a los grupos criminales.

Era previsible desde que nombró a Omar García Harfuch como secretario de Seguridad y Protección Ciudadana y lo dotó de más facultades.

Al final lo que cuenta son los hechos.

Ojalá y las cosas mejoren, el gobierno de Sheinbaum es aún joven y tendrá tiempo de avanzar en ese tema.

Por cierto, hoy nos visita la Presidenta y (obviamente) será recibida y atendida por el gobernador Alfonso Durazo.

Dará el banderazo de arranque de un nuevo hospital que prometió en San Luis Río Colorado y el domingo estará en Bavispe, justa la tierra que vio nacer al mandatario estatal.

Hay agenda en Sonora, sobre todo la relacionada con el Plan Sonora de Energía Sostenible, que impulsa Durazo y que cuenta con el respaldo del Gobierno federal.

Mire, ya he abordado aquí muchas veces el tema, así que no nos vamos a marear con lo mismo.

Simplemente esperemos que en esta primera parte del gobierno de Sheinbaum, que es al mismo tiempo la segunda parte del gobierno de Durazo, se registren todos los avances posibles.

LOS MACHETERITOS

Déjeme regresar brevemente al tema de la inseguridad en Sonora, sobre todo cuando se habla de combatir las causas.

Parece que tenemos un reto grande como sociedad en todo Sonora, aunque las expresiones que refiero se documentaron en Hermosillo.

Se ha dado cuenta recientemente de pleitos, agresiones y hasta detenciones de menores de edad que protagonizan pleitos y/o agresiones por fuera de escuelas secundarias.

O de chavitos que apenas pueden cargar un machete, encontrados a media noche por elementos municipales deambulando por calles de la periferia de la capital.

Señores, pues ahí está el origen y ese tema no acepta diferencias políticas, ideológicas o partidistas.

O le entramos todos o dentro de poco tiempo veremos elevarse de nuevo los índices de inseguridad, cuando esos menores de edad crezcan un poco más así como van, sin el menor control de nadie y entonces sean capaces de cosas aún peores.

Como candidatos y luego como gobernantes ambos. Entiendo y veo que en la Presidenta se mantienen líneas discursivas similares a las de su antecesor, ella es al final mujer de izquierda, incluso más auténtica o con más trayectoria que el propio AMLO.

Al menos ella no anduvo brincando de un partido a otro, así como muchos que hoy forman parte de la llamada 4T.

En el tema que nos atañe a los mexicanos que es la inseguridad está a la vista de todos que ya se acabaron los abrazos.

Quedan los balazos (cuando sea necesario), las labores de inteligencia, la coordinación entre instituciones y entre países (concretamente con EEUU) y el alto deber de recuperar para la gente de bien vastas regiones de México.

Algunos analistas (habemos muchos ahora) consideran que lo mejor que le pudo pasar a la doctora es la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, porque si ya pensaba dar un viraje a la estrategia contra la delincuencia, el vecino genera aún mayores motivaciones.

Así que si ella quiere seguir diciendo “abrazos, no balazos”, yo no tengo ningún inconveniente, siempre y cuando en la práctica el gobierno haga replegarse a los grupos criminales.

Era previsible desde que nombró a Omar García Harfuch como secretario de Seguridad y Protección Ciudadana y lo dotó de más facultades.

Al final lo que cuenta son los hechos.

Ojalá y las cosas mejoren, el gobierno de Sheinbaum es aún joven y tendrá tiempo de avanzar en ese tema.

Por cierto, hoy nos visita la Presidenta y (obviamente) será recibida y atendida por el gobernador Alfonso Durazo.

Dará el banderazo de arranque de un nuevo hospital que prometió en San Luis Río Colorado y el domingo estará en Bavispe, justa la tierra que vio nacer al mandatario estatal.

Hay agenda en Sonora, sobre todo la relacionada con el Plan Sonora de Energía Sostenible, que impulsa Durazo y que cuenta con el respaldo del Gobierno federal.

Mire, ya he abordado aquí muchas veces el tema, así que no nos vamos a marear con lo mismo.

Simplemente esperemos que en esta primera parte del gobierno de Sheinbaum, que es al mismo tiempo la segunda parte del gobierno de Durazo, se registren todos los avances posibles.

LOS MACHETERITOS

Déjeme regresar brevemente al tema de la inseguridad en Sonora, sobre todo cuando se habla de combatir las causas.

Parece que tenemos un reto grande como sociedad en todo Sonora, aunque las expresiones que refiero se documentaron en Hermosillo.

Se ha dado cuenta recientemente de pleitos, agresiones y hasta detenciones de menores de edad que protagonizan pleitos y/o agresiones por fuera de escuelas secundarias.

O de chavitos que apenas pueden cargar un machete, encontrados a media noche por elementos municipales deambulando por calles de la periferia de la capital.

Señores, pues ahí está el origen y ese tema no acepta diferencias políticas, ideológicas o partidistas.

O le entramos todos o dentro de poco tiempo veremos elevarse de nuevo los índices de inseguridad, cuando esos menores de edad crezcan un poco más así como van, sin el menor control de nadie y entonces sean capaces de cosas aún peores.