¡A disfrutar del mar!

Con los primeros vacacionistas haciendo su arribo cargados de energía y felicidad, los comerciantes de Bahía de Kino se declararon listos para prestarles sus servicios durante la Semana Santa y lo hicieron saber tras instalar sus puestos de alimentos y de artículos diversos.

Ansiosos por disfrutar del Sol, la arena y el mar, algunas personas provenientes de distintas partes del Estado desde temprana hora circulaban ya por la carretera Hermosillo-Bahía de Kino en busca de unas merecidas vacaciones.

Al llegar a Kino Nuevo, su calle principal, Mar de Cortés, se observaba aún despejada y con la tranquilidad característica de aquel turístico lugar, ya que aunque algunos vacacionistas comenzaron a llegar desde ayer, la mayoría llega a partir de hoy.

Desembarcan en la playa

En las calles de este destino de playa los ciudadanos desempacaban todo lo indispensable para instalarse cómodamente a la orilla del mar y comenzar a gozar de un par de días de relajación y diversión.

Bajo un día soleado pero con un viento fresco que amenizaba con el calor, se encontraban algunos vacacionistas ya instalados que se adelantaron para apartar lugar y sombra para pasar estos días en compañía de sus familiares.

Como es del conocimiento de quienes cada año acostumbran visitar Bahía de Kino, la zona de las palapas era donde se concentraba un mayor número de personas de todas las edades que en familia generaban cada una su propio ambiente a la orilla del mar.

Levantan campamentos

A lo largo de la playa, sobre la arena y a escasos metros del mar, se observaba una amplia variedad de sombrillas de todos colores y tamaños, y unos cuantos techos improvisados que refugiaban a los viajeros de los rayos del Sol.

Y no podían faltar las casas de campaña de los más aventurados que ya se encontraban instaladas sobre la arena con el fin de pasar un par de días disfrutando de este gran destino turístico de Sonora.

Los vendedores ambulantes de mangos, cocos y otros antojitos, así como de sombreros, artesanías y demás artículos, recorrían la playa de principio a fin para ofrecer sus productos.

Tanto a quienes se encontraban practicando alguna actividad deportiva como el volibol y futbol, como a quienes sólo se dispusieron a descansar.