Detectan a niños trabajando en las calles de Navojoa

NAVOJOA, Sonora.- El sueño de Rafael era convertirse en ingeniero, pero la falta de recursos lo obligaron a abandonar sus estudios y dedicarse a las labores del campo, reveló el joven de 16 años de edad.

Así como él, hay otros menores, algunos de muy corta edad, que trabajan en los cruceros de esta ciudad, y mientras los conductores esperan a que la luz del semáforo cambie a verde, para ellos es una oportunidad de ganarse unos pesos y ayudar con el sustento a sus familias.

Rafael cuenta que sus padres son jornaleros y pese al apoyo que recibe de ellos no le alcanzó para seguir estudiando.

Alcancé a terminar la secundaria y ya la prepa no la empecé porque había que trabajar y ayudar en la casa”, comentó.

Aunque algunos ven mal el trabajo infantil, incluso las leyes lo permiten bajo estrictos criterios, y para cientos de jóvenes de escasos recursos, es una dura realidad que tienen que enfrentar.

Si hay más apoyos y escuelas, pero no solo es el acceso a la escuela, también hay que ver que en la casa hay que llevar el sustento”, señaló.

Rafael empezó a los 14 años a trabajar en el campo y ahora se está entrenando como tractorista para seguir los pasos de su padre, quien con el oficio de jornalero los sacó adelante.

“Pues si me gustaría haber estudiado, pero también me gusta trabajar; lo importante es hacer algo productivo y positivo”, expresó.

MENORES TRABAJANDO

Y es que en las calles y cruceros de esta ciudad es común ver a menores de edad trabajando; algunos de ellos limpian parabrisas, venden dulces o piden dinero para ayudar a sus familias, un panorama que evidencia la difícil situación que enfrentan cientos de familias en la región, señaló Olga Torres, presidenta de la agrupación Por Una Familia Feliz.

“Es común ver a niños trabajando en los cruceros y es evidente que lo hacen por necesidad, pero ellos tienen derecho a estar estudiando y no estar trabajando arriesgándose en la calle”, mencionó.

Incluso algunos niños trabajan vendiendo dulces o productos a altas horas de la noche, acompañados por un adulto familiar, apuntó, lo que ha generado preocupación sobre las condiciones en las que se encuentran y la necesidad de abordar este tema de manera prioritaria.

Es una forma de maltrato la sobreexplotación laboral en niños”, subrayó, “un niño debe dedicarse al estudio, a jugar y no tener esa gran responsabilidad de llevar el sustento a casa”.

Te puede interesar: Rescatan en Navojoa a 7 niños obligados a trabajar en las calles

HAY RIESGOS

Que los niños estén en la calle realizando labores, los expone a infinidad de riesgos, tanto físicos como emocionales, o incluso riesgos de explotación, violencia y abusos, advirtió José Inés Buitimea.

“El que anden en la calle están expuestos a diferentes factores, incluso a compañías que pueden orillarles al consumo de alguna sustancia no permitida”, apuntó el director del Centro de Rehabilitación Narconon.

Y es uno de los lugares, la calle, donde pueden tener acceso a sustancias que, por la falta de supervisión de algunos adultos o familiares, pueden iniciarse en el consumo de algún tipo de drogas.

La edad de inicio en el primer contacto con las drogas anteriormente era a los 12 años, luego bajó a los 11 años y ahorita vemos que ya a los 10 años empiezan con el alcohol y cigarro”, puntualizó.

Como centro de rehabilitación, llevan pláticas y talleres a escuelas, destacó, para informar a los niños y jóvenes sobre los riesgos del consumo de las drogas, con lo que buscan prevenir que los menores de edad entren en el consumo de estas sustancias.

DE PASO

En el caso de los menores que andan en cruceros trabajando, son foráneos y van de paso, indicaron autoridades del DIF, incluso así fue con el caso más reciente donde siete niños fueron resguardados en un albergue de esta institución porque eran explotados laboralmente por sus familiares.

Luz Argel Gaxiola, presidenta de DIF Navojoa, mencionó que son en las periferias de la ciudad y algunos cruceros donde han detectado casos de niños trabajando y reiteró que la denuncia es la principal forma de erradicar esta práctica.

El DIF cuenta con cinco albergues para niños donde pueden ser refugiados en caso de que se determine que sus familias no están en condiciones de cuidarlos o bien que existe maltrato o abuso infantil.

Según el registro de la Subprocuraduría de la Defensa del Menor, en Navojoa se tiene un promedio de 78 niños albergados, algunos de ellos pedían dinero en las calles y luego de diversos estudios a las familias se determinó que no estaban aptos para su cuidado.

Como parte de la corresponsabilidad de las familias, dijo, se maneja el programa Red Soporte, con el que se pueda garantizar que algún integrante de la familia pueda dar cobijo a un niño afectado y mantener la estabilidad en el núcleo familiar.

CASAS DE RESGUARDO

La presidenta del DIF detalló que son las casas hogar Claret, Betesda, Esperanza, el Caari Al Leiya y Dios Proveerá, los centros de resguardo para apoyar a niños en situación vulnerable.

Recordó que junto a Seguridad Pública e instancias de prevención, se encuentran en el monitoreo constante para evitar que se presenten casos de trabajo infantil, siendo el objetivo de DIF el procurar el bienestar de los niños.

En el caso de los siete menores resguardados porque trabajaban en los cruceros de las calles, dijo que no pueden dar más información, pues el caso fue tomado por autoridades estatales y se encuentra en investigación.

PARA SABER

• Información de DIF Navojoa señala que reciben hasta 200 denuncias al mes por maltrato infantil y es la omisión de cuidados la principal causa.
• En el caso de los niños detectados trabajando en las calles recientemente, menciona que pertenecen a familias que estaban de paso. En total eran siete y quedaron bajo resguardo en un albergue de la ciudad.