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PIENSA

Nick Sitzman era un fuerte, saludable, y ambicioso empleado del ferrocarril de carga en Estados Unidos. Tenía fama de muy trabajador, una linda esposa y dos hijos, y muchos amigos. En un día de verano, a todos los empleados de la estación se les hizo saber que podrían salir una hora más temprano, en honor del supervisor que cumplía años ese día. Mientras se hacía el último chequeo en uno de los carros refrigerados, Nick quedó por accidente encerrado con llave en uno de ellos. Cuando se dio cuenta de su situación, y acordándose de que sus compañeros saldrían más temprano ese día, empezó a sentir pánico y a desesperarse. Comienza a gritar y a golpear el vagón, pero todo es inútil, nadie lo escucha ya, todo mundo se ha retirado. Con el conocimiento que tiene de las temperaturas que se manejan en el vagón, comienza a calcular que morirá congelado si no sale pronto de ahí. Deseando que su familia sepa lo que le sucedió, Nick encuentra un cuchillo y empieza a marcar unas letras en el piso de madera. Escribió lo siguiente: “Está muy frío, mi cuerpo se empieza a entumir, si sólo pudiera dormir. Éstas pueden ser mis últimas palabras”. La siguiente mañana, cuando el personal abre las puertas del carro, encuentra el cuerpo sin vida de Nick. La autopsia revela que el cuerpo fallece por haberse congelado hasta morir. Pero lo que no sabía el médico forense era que la refrigeración del vagón no estaba prendida, y la temperatura ambiente era de 15 grados centígrados; Nick en realidad había fallecido por el poder de sus propios pensamientos. El siquiatra Daniel G. Amen nombra a los pensamientos que limitan nuestras acciones ANT´s, que por sus siglas en inglés significan pensamientos automáticos negativos, y así como las hormigas nos arruinan la comida en un picnic, así ellos pueden arruinar la experiencia de la vida diaria. El Dr. Amen recomienda que aprendamos a espantar estas hormigas; primero tenemos que estar conscientes de estos pensamientos negativos, después tenemos que desecharlos, y por último tratar de reemplazarlos por pensamientos positivos y afirmativos. Vamos a tratar de explicarnos: La clave para poder manejar cualquier pensamiento negativo es entender que ultimadamente en uno está la capacidad de escuchar o estar de acuerdo con algún pensamiento. El hecho de que lo tengas o lo escuches no significa que sea cierto. ¿Este pensamiento me ayuda o me lastima?, ¿me acerca o me aleja de mis objetivos?, ¿me motiva a la acción o me bloquea con angustia y miedo? El pensamiento de siempre-o-nunca En realidad muy pocas cosas son para siempre o nunca. Si uno piensa que siempre le va a pasar algo o que nunca va a alcanzar algo, (junto con las de todos, nadie, cada vez,) podríamos decir que ese individuo ya va derrotado. Cuando uno usa ese tipo de expresiones, generalmente está equivocado: Nunca voy a conseguir un aumento de sueldo, todo mundo toma ventaja de mí, mis empleados nunca me escuchan, nunca tengo tiempo para mí, cada vez que tomo un riesgo salgo amolado, nadie le importa si vivo o muero. Ejemplo de pensamiento positivo: En lugar de decir: Tú siempre sacas ventaja de mí, mejor expresar: Me molesta cuando abusas de mí, sé que me has tratado bien antes, y que así lo harás en el futuro. Otro ejemplo que encontramos muy interesante es cuando usamos palabras que denotan culpabilidad por parte nuestra: Debería de, tengo que, estoy obligado a… tan pronto como nos encontramos con situaciones que nos inducen a sentir que debemos hacer algo, inmediatamente creamos una situación interna que nos lleva a resistir hacerlo. Seremos más efectivos si reemplazamos estos pensamientos de culpabilidad por estos más proactivos: En lugar de decir me debo poner a dieta, expresar: Sería muy inteligente de mi parte adelgazar; tengo que estudiar por sería más conveniente de mi parte estudiar un rato más; estoy obligado a hacer más ejercicio, mejor para el logro de mis objetivos sería formidable caminar quince minutos diarios. No permita que su pensamiento sea un crítico exasperado suyo, mejor conviértalo en su coach interior, que sea el que lo anime, lo motive, ¿no le parece buena idea para este segundo semestre del año? Octavio F. Ballesteros n., socio del Despacho Ballesteros y Asociados, consultores en planes de ahorro y protección. Distribuidor autorizado de la revista Hacer Familia. Correo: octaviofco@hmo.megared.net.mx

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