Cerro de la campana
Como en los viejos tiempos, cuando diputados del PAN o del PRI paralizaban el Congreso del Estado, legisladores de Morena hicieron ayer lo mismo, luego de que no estuvieron de acuerdo con la modificación de la orden del día, que llevó a la elección de la mesa directiva de la Diputación Permanente. La pelea por el control del Poder Legislativo provocó que hubiera gritos y reclamos, incluso hasta llegar a arrebatarse el micrófono en el Pleno, todo en presencia de estudiantes de la Universidad de Sonora campus Caborca, quienes eran los invitados especiales. La penúltima sesión del periodo ordinario inició unos minutos tarde y sin la presencia de la mayoría de los diputados del partido de Movimiento Regeneración Nacional, pues ellos tenían una reunión previa para ponerse de acuerdo; los legisladores Luis Armando Colosio y Miguel Ángel Chaira, este último incluido en la mesa directiva de la Permanente, sí asistieron. La presidenta del Congreso, María Dolores del Río, inició oficialmente, pidió se pasara lista de asistencia y así se hizo, después se dio lectura a la orden del día: Eran doce puntos, entre los cuales estaban algunos que se consideraban de importancia, como los temas de la legítima defensa y maltrato infantil. Fue el legislador de Encuentro Social, Jesús Alonso Montes Piña, el que solicitó que el punto número once, que era la elección de la nueva mesa directiva, pasara a ser el primer punto, y así se decidió; se votó y hubo una propuesta para la nueva presidencia que recaería en el diputado del Verde Ecologista, Luis Mario Aguilar. Todo transcurría normal pero al momento de darse la lectura de los asuntos en correspondencia se presentaron los legisladores de Morena y tomaron el Pleno, donde la diputada Yumiko Palomarez no dejó hablar a la presidenta del Congreso, quitándole en varias ocasiones el micrófono, argumentando acuerdos anteriores. Este tema dará para mucho ya que el grupo parlamentario de Morena solicitó reversa a la decisión que se tomó y se retome el proceso. La toma del Congreso provocó diversas opiniones en las redes sociales, algunas a favor de los morenistas y otras en contra, pero la mayoría fueron en rechazo de la paralización del Poder Legislativo. Como no se había visto en otras ocasiones, el comandante de la Policía Municipal de Miguel Alemán, César Alejandro García Medina, asesinado el pasado martes, fue despedido con honores por todas las corporaciones policiacas. Militares, policías federales, estatales y municipales estuvieron presentes en el último pase de lista, lo que provocó el llanto de algunos y la impotencia en otros. Un día antes, el comisario general de la corporación, Luis Alberto Campa Lastra, había exigido resultados a la Fiscalía General de Justicia del Estado sobre la detención de los responsables de este crimen y de otros agentes; se habla de dos líneas de investigación, pero no se han revelado. Son al menos seis policías estatales y municipales los que han sido privados de la vida en este año, tres de ellos en la capital del Estado. El oficial García Medina tenía cerca de dos meses como encargado de la seguridad de la Comisaría Miguel Alemán, a donde llegó después de coordinar el Grupo de Operaciones Tácticas.
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